Paseo al Cerro San Cristóbal
¡¡Los esperamos!!
Registro de actividades, anécdotas, noticias, avisos, etc. de voluntarios de La Chimba, del proyecto Belén U.C.
De acuerdo con la información obtenida a partir de los miembros de la comunidad, los primeros habitantes llegaron a la Chimba el año 1971. En sus inicios, el lugar correspondía a una toma llamada Terremoto 71, creada para cobijar a algunos de los damnificados del sismo del 8 de Julio de ese año. Estos conformaban un grupo de 18 familias que anteriormente se habían tomado un sector cercano a la Chimba llamado “La Palmilla” y que, tras haber sido detenidos algunos de ellos por múltiples manifestaciones y protestas, fueron trasladados al actual terreno de La Chimba, perteneciente en aquel entonces a la Municipalidad de Conchalí.
Entre los años 71 y 73, el grupo creció a cerca de 100 familias, cuyos miembros empezaron a organizarse; se repartieron los terrenos y comenzaron el levantamiento de sus mediaguas. Estas viviendas fueron subsidiadas tanto por la municipalidad como por otras instituciones, entre ellas, el Hogar de Cristo, y asignadas según las necesidades económicas de cada familia.En 1979 esta toma pasó a ser la población La Chimba, la cual ya contaba con sistemas de agua y letrinas instaladas en 1976. Más tarde, a raíz del hacinamiento en que se encontraban, surgió la idea de empezar a construir sus propias casas. El Sindicato Renacer, formado por las mujeres de la población, junto con la ayuda de la corporación JUNDEP encargado de capacitarlas y supervisarlas, comenzó a llevar a cabo el proyecto. Fueron capacitadas nueve mujeres, formándose más tarde cuadrillas especializadas en distintas áreas. El proyecto se denominó “Construyendo juntos” (1987), cuyo objetivo consistía en que cada familia tuviera su propia casa. Una vez construidas, éstas, junto a los terrenos, quedaron a nombre de las mujeres.
Sin embargo, el Sindicato Renacer comenzó a tener problemas debido a que muchos de sus integrantes eran dirigentes políticos y desarrollaban los proyectos de acuerdo a sus intereses y no a los de la comunidad misma. Se produjo un quiebre dentro del sindicato, por lo que volvieron a organizarse, aproximadamente 40 mujeres, y a conformar otro grupo, llamado “Centro Ecológico Social: Mujeres del Futuro” en el año 1991. Esta organización llevó acabo nuevos proyectos tales como la limpieza de las calles, la construcción de una multicancha, la transformación de un basural cercano en un parque, trabajos con los jóvenes, construcción de rejas en las casas y la rehabilitación de jóvenes adictos al neoprén. Desde ese entonces La Chimba empezó a formar parte de la Municipalidad de Recoleta.
Los problemas que enfrenta La Chimba son comunes a muchas otras poblaciones de Santiago y de Chile. A lo largo de los ya casi tres años que Belén UC está trabajando ahí, nos hemos percatado que existen graves situaciones de delincuencia, consumo y microtráfico de drogas, cesantía, hacinamiento, sensación de inseguridad y un bajo nivel de ingresos. Si bien todos estos males están correlacionados, hay algunos que son especialmente preocupantes para sus habitantes: la delincuencia, la cesantía y la droga. Afectan a toda la población pero son percibidos como un problema propio de la juventud, ya que ellos muestran ser los más expuestos a estas situaciones.
Esta percepción se ve respaldada por la propia experiencia que ha brindado el trabajo de los casi 100 voluntarios de Belén UC que han participado en el lugar. Podemos decir con seguridad que los jóvenes forman el grupo al cual nuestro programa solidario aún no ha podido llegar con profundidad. Aquellos jóvenes que viven la cesantía no encuentran espacios para usar su tiempo libre en actividades que sean productivas para la comunidad o incluso para ellos mismos. Es decir no dedican su día a elevar su capital humano, sino que más bien intentan vivir cada momento con tal de experimentar alguna sensación agradable, aunque ésta sea muy pasajera. Esto da pie a que prefieran consumir drogas o alcohol y que posteriormente, envalentonados por los efectos de los estupefacientes, decidan delinquir. Una vez que han manchado sus antecedentes les resulta aún más difícil conseguir trabajo.
Los tres problemas señalados anteriormente han provocado que la población haya adquirido una pésima reputación, que lleva incluso a que pobladores de los sectores más externos prefieran no entrar a la población y no inmiscuirse con las demás personas. “La gente nos discrimina por ser de La Chimba, ya que tenemos una reputación que no nos merecemos. Muchos de los que roban y cogotean ni siquiera son de La Chimba, pero si empeoran nuestra imagen”, señala una señora de La Chimba.
Junto a estos dramas se les unen otros que son menos visibles, pero que se hacen evidentes luego de conocer con profundidad a La Chimba y a su gente. Estos tienen que ver con la dignidad, la felicidad y la formación humana de las personas. Estos son a la vez causa y consecuencia de los males expuestos anteriormente y provocan que muchas de estas personas entren en un círculo vicioso del cual es difícil salir: falta de expectativas, baja autoestima y falta de un plan de vida. “Hay jóvenes que son incapaces de ver que van a hacer el día de mañana y nosotros no queremos que se pierda una generación por esto”, explica una pobladora. No confían en sus capacidades y por lo tanto se quedan estancados en su realidad del día a día, sin imaginar siquiera que pueden optar a una vida mucho mejor.
Belén UC en La Chimba
El programa solidario Belén UC ha realizado en La Chimba un trabajo con jóvenes universitarios desde el mes de abril del año 2003. Ese año, el vicario de la zona norte de Santiago, Padre Javier Manterola pidió a la Universidad Católica que enviara alumnos a realizar un trabajo pastoral a la zona. Este año son más de 90 quienes la visitan continuamente y entregan su ayuda en los diferentes talleres que actualmente existen. “Creo que el programa es muy bueno, ya que se está empezando a recobrar el espíritu que antes existía. Hoy son los únicos que nos están ayudando”, nos cuenta una fiel colaboradora de Belén UC.
También La Chimba ha sido lugar de Misiones y Trabajos. La Misión País estuvo presente en el mes de enero de 2004 y 2005, las Pastorales de la Universidad Católica también la han visitado en las Operaciones de Salud y de Ingeniería (2005), y en las Misiones de Semana Santa (2006).